El trasplante de pelo es la solución para la alopecia que más satisfacción produce en los pacientes que padecen esta patología, incluso por encima de otros tratamientos como las soluciones farmacológicas, las lociones o las cremas anti-caída. Así, lo asegura una reciente encuesta publicada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) que evalúa las diferentes opciones existentes en el mercado para aquellas personas que sufren la caída del cabello.
De entre los más de 800 encuestados, el 74% de los participantes señaló que había recurrido en más de una ocasión a productos para frenar la pérdida de pelo, como champús, lociones o cremas, y aseguraron que no notaron ningún resultado ni mejoría. Mientras que aquellos que optaron por alguna de las técnicas de trasplante capilar se mostraron satisfechos e indicaron que era el tratamiento más efectivo contra la alopecia.
Con respecto al resto de productos que mostraron una menor o nula eficacia, especialmente las lociones capilares farmacológicas, solo funcionaron durante el periodo de uso y, además, presentaron diferentes efectos secundarios. Así, algunas personas aseguraron haber sufrido una notable reducción de la libido y, en un 27% de los casos, problemas de erección. Por el contrario, las personas que optaron por injertos capilares solo necesitaron de días de reposo tras la cirugía. Además, lo consideraron más seguro y que los resultados eran más duraderos.
En España, la alopecia androgenética la padece el 40% de los hombres de entre 18 y 39 años y en un 95% aquellos mayores de 70. De estos, los hombres más jóvenes son los principales consumidores de productos y tratamientos para solucionar la calvicie, según datos de la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
El trasplante de pelo, una solución duradera
En la Unidad Médica Serrano (UMS), centro pionero y puntero en Madrid en cirugía de trasplante capilar con un equipo formado por los mejores profesionales, dirigidos por la doctora Mónica Rolando, se analiza de manera personalizada a cada paciente para obtener los resultados más naturales y satisfactorios.
Una vez realizado el trasplante de pelo, por la técnica de injerto capilar más adecuada, no es necesario que el paciente lleve ningún tipo de vendaje sobre la zona trasplantada o zona donante. Solo se aconseja mantener unos cuidados mínimos durante las 48 horas posteriores a la intervención. Tras ese tiempo, se puede lavar el pelo con normalidad.
Otras de las dudas más comunes que plantean las personas que deciden realizarse un injerto capilar son las posibles cicatrices que puedan quedar tras la operación. Toda cirugía deja un rastro, en este caso mínimo y, además, las cicatrices no son visibles ni suponen perjuicio estético para el paciente.
Tras el postoperatorio y con el debido seguimiento, en la gran mayoría de los pacientes, el injerto capilar permanecerá para toda la vida ya que los pelos seleccionados para el trasplante están genéticamente preparados para no padecer alopecia, según han podido constatar la Doctora Rolando y sus colaboradores de UMS, expertos en técnicas de microtrasplantación capilar, en sus décadas de experiencia.