Acné

El acné es una enfermedad de la piel muy común. Son los conocidos granos o espinillas en la cara, la frente, el cuello, el pecho, la parte superior de la espalda y los hombros.

Es un problema que afecta en mayor medida a los adolescentes durante la pubertad, cuando se identifica como acné juvenil. Aunque ellos son la población más afectada, se puede dar en adultos de cualquier edad por diferentes causas.

En Unidad Médica Serrano analizamos cada caso de forma personalizada para ofrecer a nuestros pacientes el mejor tratamiento dermatológico para combatir el acné y mejorar su bienestar físico y emocional.

Tipos de granos

Las erupciones cutáneas propias del acné empiezan siendo comedones, los puntos negros. A veces se inflaman y ocasionan pápulas, los granitos rojos. En ocasiones tienen una cabeza blanca, las pústulas.

El acné puede dar lugar a quistes en las capas más profundas de la piel. Y lo más importante, se pueden formar cicatrices. Por ello, es importante contar con el asesoramiento de un dermatólogo si se producen brotes agresivos, más allá de la aparición ocasional de espinillas en cara y cuello.

Tipos de acné

Según la gravedad y el tipo de lesión que produce, podemos hablar de diferentes tipos:

Acné comedoniano

Este tipo (no inflamatorio) es el más común, sobre todo en la adolescencia. Predominan elementos no inflamados, es decir, aparecen granos o espinillas, pero no hay infección ni inflamación de la piel. Normalmente no deja cicatrices y responde bien a los tratamientos y recomendaciones de higiene y limpieza, y tratamientos tópicos (aplicados sobre la piel).

Acné inflamatorio

En este caso podemos hablar de dos tipos dentro de esta categoría:

    • Acné pápulo-pustuloso: el paciente presenta una mezcla de pápulas y pústulas, lesiones que dejan la piel roja e inflamada. Es un tipo moderado que suele aparecer sobre todo en la cara (frente, nariz y mejillas). Predominan los granos rojos, inflamados y granos con pus. Según la respuesta de cada individuo pueden quedar cicatrices más o menos visibles. Puede requerir el tratamiento con antibióticos o con medicamentos retinoides.
    • Acné nódulo-quístico: el cierre de los folículos pilosos da lugar a granos inflamados que se extienden hasta capas profundas de la piel y quistes de diversos tamaños. Suele requerir tratamiento vía oral con antibióticos, retinoides y antiinflamatorios. Incluso, según la gravedad del caso, puede ser necesario realizar pequeñas intervenciones quirúrgicas.

Tipos, causas y tratamiento del acné

Principales causas del acné

Ante la duda de los pacientes sobre por qué salen granos en la cara, se pueden identificar cuatro factores principales que lo causan:

  • Producción excesiva de grasa
  • Sobrecrecimiento de Cutibacterium acnes
  • Disfunción de la maduración del folículo piloso.
  • Exceso de actividad de tipo hormonal

Las hormonas suelen ser las principales responsables de los brotes de acné. En el caso de los adolescentes, durante la pubertad, el aumento del nivel de andrógenos -hormona sexual masculina- provoca que las glándulas sebáceas se agranden y produzcan más sebo.

En el caso de las mujeres, los cambios hormonales relacionados con el embarazo y el uso de anticonceptivos orales también pueden afectar a la producción de sebo. Además, en su sangre circulan bajas cantidades de andrógenos que pueden empeorar el acné.

De forma paralela, existen causas externas que pueden empeorar los brotes de acné tanto en adultos como en adolescentes. Un ejemplo de ello es la dieta. Diferentes estudios han demostrado que ciertos alimentos como los lácteos o los productos ricos en hidratos de carbono empeoran la gravedad del acné y producen un mayor número de espinillas. Por otro lado, investigadores defienden que existen alimentos que inducen la aparición del acné, como aquellos ricos en grasas procesadas y azúcares, como galletas, bollería, productos precocinados o comida rápida.

Tratamiento para el acné

Tras una primera consulta diagnóstica, el dermatólogo recomendará el tratamiento más adecuado para eliminar el acné y cuidar la piel de cada paciente. Según el tipo de acné y el grado de cronicidad de la enfermedad se pueden establecer diferentes tipos de tratamiento.

Medicamentos para el acné

los fármacos indicados para el acné sirven principalmente para reducir la producción de grasa, acelerar la renovación de células dérmicas y reducir la inflamación. El consumo de estos medicamentos, principalmente retinoides, se debe hacer de forma prolongada en el tiempo, el acné puede tardar varios meses o años en desaparecer completamente. Con frecuencia se recomienda una combinación de medicamentos tópicos y orales. Entre los medicamentos de mayor efectividad se encuentran:

Isotretinoína

es el medicamento más efectivo y recomendado para acabar con el acné. Es conocido también por su nombre comercial original: Roacutan. Se trata de un potente medicamento indicado para personas cuyo acné grave no responde a los demás tratamientos o si presenta cicatrices. Su funcionamiento se basa en la mejora de la maduración de la piel y la disminución de la producción de sebo. Puede causar efectos secundarios en los pacientes, por lo que la supervisión continua del dermatólogo es esencial.

Los dermatólogos de Unidad Médica Serrano realizan un seguimiento pormenorizado de todos los pacientes para valorar tanto la eficacia del tratamiento como minimizar el riesgo de sufrir efectos secundarios.

Antibióticos

los antibióticos para el acné actúan sobre el exceso de bacterias en la piel y reducen el enrojecimiento. Según las necesidades y características del paciente se le recetarán antibióticos de uso tópico, orales o una combinación de los dos. El tratamiento con antibióticos siempre debe ser prescrito por el dermatólogo.
Normalmente el especialista recomendará el consumo de antibióticos combinados con otros fármacos, como el peróxido de benzoilo, para evitar desarrollar resistencia a los antibióticos. Los antibióticos pueden causar efectos secundarios leves, como malestar estomacal y mareos, e incrementan la sensibilidad de la piel al sol.

Tratamiento hormonal

en las mujeres jóvenes, para el tratamiento del acné hormonal, se recomienda la prescripción de anticonceptivos orales para la regulación hormonal. Esto se debe a que algunos fármacos anticonceptivos son antiandrógenos, limitan la producción de andrógenos y su actividad, reduciendo con ello el acné.

La mayoría de productos están indicados para tratar el acné juvenil, al ser los adolescentes quienes más sufren este trastorno de la piel. Por lo que no serán igual de efectivos en los adultos. Para un eficaz tratamiento del acné adulto, el dermatólogo recomendará los mejores productos, tanto para eliminar los granos de la piel como para tratar las causas del acné. Además, se debe extremar la higiene de la cara y seguir una serie de recomendaciones diarias para el cuidado de la piel.

Admin UMS