Efluvio telógeno

Una de las causas más frecuentes que provocan la caída de pelo, después de la alopecia androgenética, es el efluvio telógeno. El efluvio telógeno es una alteración del ciclo vital del pelo, especialmente en la fase de crecimiento, que produce una pérdida de cabello notable durante un periodo de tiempo concreto. Esta suele ser reversible.

La duración de la caída del pelo transitoria varía en función de si es un efluvio telógeno agudo (un periodo de tiempo más corto) o un efluvio telógeno crónico (que se puede prolongar durante unos seis meses). Esta patología es relativamente frecuente en mujeres durante su juventud, aunque también se puede padecer en edades más avanzadas, así como en algunos hombres.

Causas del efluvio telógeno

La aparición del efluvio telógeno es multifactorial y sus casusas pueden ser diversas. Desde situaciones de presión o estrés emocional, reacción del organismo a algunas cirugías e infecciones, embarazo o falta de nutrientes como vitaminas, entre otras. En muchos casos, resulta imposible identificar la causa principal aunque, en otros, son varios los factores que influyen en la alopecia por efluvio telógeno.

Cualquiera de estas causas genera una alteración en la raíz de los folículos pilosos, produciendo un daño en su estructura celular y afectando al crecimiento del pelo. Esta interrupción del ciclo de vida del pelo puede no manifestarse de inmediato y aparecer varios meses más tarde desde la aparición de su causa.

La caída de pelo provocada por el efluvio telógeno es notable y se puede presentar con pérdidas en forma de mechones de cabello en cualquier actividad del día a día, provocando una disminución de la densidad de pelo muy considerable que deje visible el cuero cabelludo. No obstante, debe ser el especialista en salud capilar quien realice un diagnóstico adecuado para descartar otras causas y evaluar el estado actual del paciente así como los niveles de nutrientes u otros factores.

Tratamiento y recuperación del efluvio telógeno

El efluvio telógeno tiene solución y, con un tratamiento y técnica adecuada, se consiguen grandes resultados. En la mayoría de ocasiones, esta pérdida de pelo cesa de manera natural y el paciente recupera la densidad de pelo habitual de una manera progresiva aunque la recuperación se puede prolongar durante varios meses.

Si la pérdida de cabello perdura demasiado tiempo o el profesional médico ha identificado las posibles causas, es necesario recurrir a tratamientos como medicamentos, suplementos vitamínicos o técnicas de trasplante capilar para solucionar este problema de alopecia.

Además, entre otras medidas, se recomienda mantener una correcta higiene del pelo para regular los niveles de grasa en el cuero cabelludo, utilizar productos que puedan fortalecer las unidades foliculares. Aunque, como norma general, el efluvio telógeno desaparecerá por si solo y las unidades foliculares se repondrán de manera natural.

Admin UMS