La caída del cabello no responde a edades, géneros ni temporadas. Puede comenzar en plena juventud o ya en la madurez y en cualquier época del año. No obstante, durante el verano ya sea porque prestamos más atención al físico, pasamos más tiempo al aire libre o nos bañamos con más frecuencia, aumenta la percepción de la pérdida del cabello. Así, lo señala un trabajo publicado en la revista British Journal of Dermatology que ha estudiado la relación entre la estacionalidad y la caída del pelo mediante el análisis de las búsquedas en Internet, realizadas durante 13 años, por millones de personas en ocho países a través de Google.
Diversos estudios aseguran que esta caída responde a un ciclo natural del cabello aunque los investigadores de este estudio defienden que, el verano y el comienzo del otoño, se asocian con una mayor pérdida de cabello, al menos por la preocupación que demuestran los usuarios de internet. Por ello, según los investigadores, las conclusiones de este trabajo pueden ayudar a los pacientes en dar el paso de cara a realizarse un injerto capilar y conocer cuándo es un buen momento para evaluar el estado del cabello y valorar el tratamiento más adecuado.
Además durante el verano, como es obvio, aumenta la exposición al sol y en consecuencia la absorción de vitamina D, un nutriente fundamental para el desarrollo del cabello. La falta de esta vitamina puede influir en el avance de la alopecia ya sean en hombre como en mujeres, según advierten los expertos.
La mejor época para una cirugía de injerto capilar es cuando el paciente dispone de tiempo
Desde la Unidad Médica Serrano (UMS), centro pionero y puntero en Madrid en cirugía de trasplante capilar, se destaca que no existe ninguna época del año preferente para realizar un trasplante de pelo, ya que no influye en los resultados finales de la cirugía y posterior tratamiento. Sin embargo, hay que tener en cuenta varios factores para tomar la decisión adecuada. Por ejemplo, si el paciente opta por realizarse un injerto capilar durante el verano debe considerar que en los días posteriores a la operación no podrá bañarse en la piscina o en el mar y tampoco podrá tomar el sol con normalidad.
Es cierto que gran parte de los pacientes prefieren realizar el tratamiento en los días previos a las vacaciones para poder realizar una vida normal sin tener que acudir al trabajo o cumplir con otros compromisos sociales. Pero la única condición temporal a tener en cuenta es la necesidad de disponer de unos días para el proceso postoperatorio de la cirugía de trasplante y así poder recuperarse y realizar los cuidados que indique el médico.
Ante cualquier duda, puede ponerse en contacto con la Unidad Médica Serrano y pedir cita sin compromiso donde un equipo con los mejores profesionales estudiará su caso de manera individualizada y detallada para conseguir el tratamiento que mejor se adapte a sus características, condiciones y necesidades.