Cada día son más las personas, tanto hombres como mujeres, que se someten a una cirugía de injerto capilar para solucionar sus problemas de alopecia y mejorar su presencia, autoestima y confianza personal. Las técnicas de trasplante capilar son mínimamente invasivas por lo que los pacientes pueden llevar una vida normal a los pocos días de la operación de microinjerto de pelo.
Sin embargo, para que los implantes capilares tengan más garantías de éxito y las unidades foliculares se adapten de manera correcta en la zona trasplantada, es necesario mantener unos cuidados mínimos que eviten daños en el injerto y permitan que se asienten en el cuero cabelludo.
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Consejos para el cuidado del cabello tras un injerto capilar
Tras la cirugía de trasplante de pelo, el área receptora está más sensible debido al estrés al que se ha visto sometida durante la operación. Por ello, aunque el postoperatorio es muy breve, se recomienda evitar lo máximo posible cualquier contacto con la región receptora durante los dos o tres primeros días después de la intervención.
En cuanto al descanso, es aconsejable que la cabeza se sitúe en un punto algo más elevado que el resto del cuerpo, levantada por una o dos almohadas y dormir boca arriba. Es recomendable también evitar inclinarse hacia delante y no estar sentado frente al ordenador o la televisión, con el fin de impedir cualquier tipo de sangrado en la zona trasplantada o la aparición de edemas en la parte superior del rostro.
Con respecto a los cuidados específicos del cabello, es muy importante lavarse el pelo con delicadeza durante la semana posterior a la cirugía capilar. Este proceso se realizará mediante leves masajes sobre los injertos capilares evitando siempre frotar con fuerza dicha área. Nunca hay que utilizar el chorro de la ducha con alta presión directamente sobre el cuero cabelludo, es preferible realizar el lavado con el mango de la ducha, con agua muy suave para empapar el pelo. Así, se evitarán los movimientos bruscos que puedan dañar las unidades foliculares y se eliminarán las costras que puedan aparecer en el cabello.
Este mismo proceso se continuará en el secado, de forma muy suave con una toalla sin frotar y con secador a baja potencia.
Recomendaciones para el día a día tras un trasplante de pelo
Pero no solo hay que centrarse en el cuidado del microtrasplante capilar, también es adecuado tener en cuenta qué cosas se pueden hacer y qué acciones no se deben realizar en los días posteriores a un injerto capilar. En este sentido, es importante evitar los baños en playas o piscinas en las semanas siguientes. Además, no se deberá consumir tabaco o alcohol o practicar ejercicio físico. Tampoco se puede utilizar casco de moto, bicicleta, esquí o trabajo.
No obstante, a estas recomendaciones se debe añadir impedir el contacto con la radiación solar durante unas cuatro semanas tras el injerto capilar y beber abundante agua para mantenerse hidratado. En el caso de salir a la calle, es conveniente cubrirse la cabeza con un gorro, gorra u otro elemento de protección contra los rayos del sol. Esta medida es muy importante para que las pequeñas cicatrices de las incisiones realizadas para la extracción de las unidades foliculares y su posterior trasplante se cierren de forma rápida y adecuada.
La Unidad Médica Serrano (UMS), centro pionero en Madrid en microtrasplantación capilar cuenta con los mejores profesionales, dirigidos por la doctora Mónica Rolando, recomienda seguir unos cuidados postoperatorios para cualquiera de las técnicas de cirugía de injerto capilar. Así, se favorecerá una recuperación más rápida, eficaz y cómoda para el paciente y garantizar los mejores resultados posibles.